El Ayuntamiento de Béjar ha recibido el informe arqueológico que permite la reanudación de las obras de urbanización de San Juan tras el hallazgo de restos óseos la semana pasada. El arqueólogo de la Delegación Territorial de Salamanca visitó la zona el 1 de octubre y emitió su informe el día 2, en el que determina la conservación in situ de las sepulturas encontradas mediante protección con malla geotextil y un lecho de tierra de tres a cinco centímetros de espesor. La empresa adjudicataria presentó ese mismo día la declaración responsable que acredita la contratación de un arqueólogo para el control de la obra.
El informe arqueológico establece que las obras de urbanización no profundizarán en el espacio afectado por el hallazgo. Las dos sepulturas deben conservarse cubiertas y protegidas en su ubicación original. Los trabajos paralizados pueden reanudarse adoptando estas medidas de conservación, siempre ciñendo las remociones restantes a los niveles y depósitos alterados por obras contemporáneas, como las soleras existentes en la vía pública o las zanjas realizadas previamente para la dotación de infraestructuras.
El documento recomienda que un técnico arqueólogo cualificado supervise las excavaciones restantes para evitar su incidencia sobre niveles históricos. A falta de una normativa de actuación arqueológica dentro del Conjunto Histórico en el planeamiento urbanístico vigente, el informe recomienda al Ayuntamiento de Béjar adoptar el criterio de que todas las excavaciones que supongan remoción de tierras en las iglesias y en los espacios públicos adyacentes cuenten con control arqueológico.
El Ayuntamiento de Béjar ha comunicado al Servicio territorial de Cultura (Patrimonio) el nombramiento del arqueólogo encargado de ejercer el control arqueológico de la obra y ha dado traslado del informe de reanudación de los trabajos a la empresa adjudicataria.